La Terapia de Regresión suele ser una opción eficiente para lograr ser conscientes de lo que hacemos inconscientemente, con el fin de trabajar terapéuticamente las experiencias traumáticas ocultas de esta vida.
¿Te genera mucha ansiedad subir a un avión o alguna vez evitaste hacerlo por miedo? Muchas personas experimentan diferentes sensaciones negativas al enfrentarse con esta situación. Incluso aquellos que jamás se subieron a uno y anhelan realizar un viaje a algún destino lejano, pero la situación no se concreta por el temor a subirse a un avión.
Pueden existir diversos motivos por los que se genera este malestar, incluso algunos que ni nos imaginamos, desconocemos o mismo creemos que ya nacimos con ese temor sin explicación alguna. Para estas cuestiones, la Terapia de Regresión suele ser una opción eficiente para lograr ser conscientes de lo que hacemos inconscientemente, con el fin de trabajar terapéuticamente las experiencias traumáticas ocultas de esta vida y de existencias anteriores que desde otro plano del subconsciente pueden perturbar la vida actual.
Dicha terapia tiene como uno de sus objetivos, detectar aquello que se repite y que no sabemos de dónde viene, entenderlo y resolverlo progresivamente. Se hace a través de una relajación, y el paciente no necesita saber meditar ni ser conocedor de algún tipo de técnica previa para realizar la regresión. Están todos preparados para esto, y claro que quien se preste más a dejar fluir todo esto, permitirá que la sesión se desarrolle más fácil.
Puntualmente en el caso del miedo a volar, el paciente llega con el conflicto de dicho temor, y tal como dijimos, con esta terapia lo que hacemos es llegar a la parte inconsciente, a lo que no sabemos de dónde viene. Para ejemplificar un caso concreto, tengo una paciente de Perú llamada Daniela. Ella adquirió un pánico repentino a volar y cuando lo tratamos en la terapia, la técnica la llevó al momento en el que estaba en el vientre materno. Su mamá hizo un vuelo en el que hubo mucha turbulencia, y ella estando en su vientre adquirió toda la emocionalidad de la madre.
También lo pudo haber adquirido en el transcurso de alguna situación de la infancia, no necesariamente el miedo a volar tuvo que haber venido de alguna situación de vuelo, pero en en este caso puntual sí. Daniela había tomado muchos vuelos anteriormente y nunca había tenido problema, pero este último miedo se le despertó cuando el destino al que ella había decidido ir, era el mismo al que había ido su mamá cuando estaba embarazada.
Una vez detectado el origen, dependiendo de dónde sea y de cómo sea, se hace un trabajo de resignificación. Esto quiere decir que lo que buscamos es un nuevo significado del miedo, dependiendo de dónde viene. Llevamos al consciente una situación, cómo te afecta en tu vida actual, qué cosas te hace hacer en la actualidad y cuáles otras te impide. Puede ser que le impida volar, pero también puede impedirle aprender a conducir, porque el conducir implica velocidad, lo mismo que transitó su madre en el avión, velocidad, peligro, intensidad.
La Terapia de Regresión busca llegar a lo consciente de cómo le afectan al paciente las cosas que le impiden hacer y que logre darse cuenta que esa carga energética -en el caso del ejemplo- fue de la madre. Por otro lado, si esto sucedió en una vida pasada o en la infancia, se hace un resignificamiento y ¿qué es? se trata de hacer todo lo que no pudo hacer, esto queda justamente en una carga energética, atrapado en este espacio porque no hicimos lo que nos hubiera gustado hacer en ese momento. Desde la terapia buscamos devolverle la carga energética a la mamá y si es a una vida pasada, como mencionamos, se hace lo que no se pudo hacer.
También el miedo puede venir de algo que no tenga realmente nada que ver con volar. Por ejemplo, un avión se sacude en un día de mucha tormenta, uno percibe la tormenta afuera y tal vez en una vida pasada moriste en un campo de batalla en un día de mucha lluvia, truenos, balas, explosiones. Entonces ese movimiento del avión te trae ese recuerdo, del último momento de una vida pasada. O haber tenido alguna situación traumática en un día de lluvia también activa el recuerdo de algo no resuelto en nuestro pasado o vida pasada.
Todo pasa por algo, nada es casualidad. Esa tormenta, esa turbulencia, eso que al paciente lo llevó a tenerle miedo a volar o a alguna cuestión en la vida, pasa por algo. Pasa porque nosotros necesitamos un aprendizaje y eso va a activar lo que nosotros necesitamos aprender en esta vida.
Hay pacientes que con una sesión lo superan y otros que les lleva más tiempo. En la Terapia de Regresión, no hay fechas ni tiempos, se vuelve cuando el paciente cree que tiene que volver y te vuelve a contactar. Esto realmente hay que sentirlo, no es como la psicología en la que uno fija días y horarios, sino que se realiza cuando la emocionalidad te lleva a seguir trabajándolo.
Para acceder a todo lo mencionado, no es necesario creer, esto no va de la mano de ninguna religión ni nada, no es necesario creer porque también lo vemos -al igual que los pacientes- en los resultados.
Lo que buscamos como profesionales en la materia, es aplicar la técnica a quien busca encontrar respuestas sobre cosas que no está pudiendo trabajar o sanar en su vida. La persona está buscando esto porque no entiende qué le pasó que antes podía volar y ahora le agarró pánico, o de pronto siente que repite el mismo patrón con las parejas o siente que estudió carreras universitarias y no las logra ejercer, es encontrar el origen de lo que está pasando y no está dejando avanzar.
Gustavo N. Romoli - Terapeuta en Regresión a vidas pasadas y miembro de la International Hypnosis Association. IG: @regresionesavidaspasadas