El procedimiento se llevó a cabo sobre la Ruta Nacional Nº 12, cuando los uniformados advirtieron que un vehículo intentó evadir el puesto de control de la Fuerza. De inmediato se implementó un operativo cerrojo que permitió interceptar el rodado en el que viajaban dos personas.

Durante la inspección, los gendarmes hallaron 120 cajas que contenían un total de 60.000 atados de cigarrillos ingresados al país de manera ilegal.

Intervino el Juzgado Federal Nº 1 de Corrientes, que ordenó el secuestro de la mercadería en infracción a la Ley Nº 22.415 “Código Aduanero” y dispuso que los dos ocupantes del vehículo queden vinculados a la causa por contrabando.