La ceremonia de canonización de Acutis, conocido como el "primer santo millennial", estaba originalmente prevista para el 27 de abril, pero fue pospuesta tras el fallecimiento del papa Francisco el pasado 21 de abril.

Carlo Acutis murió en 2006 a los 15 años en Monza, al norte de Italia, como consecuencia de una leucemia fulminante. Su vida breve pero intensa ha inspirado a miles de jóvenes católicos alrededor del mundo. Combinaba su fe con pasatiempos comunes como los videojuegos y el senderismo, y empleó sus conocimientos en informática para crear una exposición virtual sobre milagros eucarísticos, una iniciativa que aún hoy recorre parroquias y escuelas.

Además de su pasión tecnológica, Acutis se destacaba por su compromiso con los más necesitados: enseñaba catequesis, repartía comida a personas sin hogar y vivía una espiritualidad profunda para su corta edad.

Desde su beatificación en 2020, su tumba en Asís se ha convertido en un centro de peregrinación, especialmente en este Año Santo 2025. En el lugar, su cuerpo reposa en un ataúd de vidrio que lo muestra vestido con zapatillas, jeans y una sudadera, símbolos de una santidad cercana y contemporánea.

Junto con Acutis, también será canonizado Pier Giorgio Frassati, otro joven italiano que falleció a los 24 años víctima de la polio. Frassati, beatificado en 1990, es recordado por su intensa vida de fe y su dedicación a los pobres.

La doble canonización representa un fuerte mensaje de la Iglesia hacia las nuevas generaciones, destacando ejemplos de santidad juvenil en tiempos modernos.