Una mujer logró sobrevivir a casi 30 puntazos efectuados con arma blanca cuando fue sorprendida y atacada por su expareja en una pizzería del barrio porteño de Núñez. Luego del salvaje intento de femicidio, el hombre comenzó a autolesionarse para quitarse la vida. Sin embargo, no pudo y finalmente quedó detenido.

El episodio, que tomó estado público en las últimas horas, sucedió el lunes pasado a las 20.45. La víctima, de 45 años, se encontraba en la cocina del comercio, situado en Quesada y avenida Cabildo, cuando el agresor, de 41, se acercó hasta el mostrador y saltó hacia ella.

Según puede verse en las imágenes tomadas por las cámara de seguridad del local, el sujeto la tomó del cuello, la tiró hacia el piso y, de inmediato, comenzó a lanzar las puñaladas.

Alertados por lo sucedido, dos empleados del lugar intentaron disuadir el ataque arrojándole palos y bandejas al hombre, que, según fuentes de la Policía de la Ciudad, inició la acción violenta porque ella se negaba a hablar con él. Después de varios minutos, la mujer, visiblemente lastimada, logró escapar de su expareja gracias a la intervención de los presentes.

Segundos después, el atacante comenzó a gritar que su hija no lo quería y que iba a quitarse la vida, mientras se propinaba puntazos. La cuestión no pasó a mayores. Personal de la Comisaría Vecinal 13B arribó al local de “Big Pizza”, donde ocurrió el incidente, y el hombre quedó detenido e imputado por tentativa de homicidio en el marco de violencia de género.

En tanto, la mujer fue trasladada de urgencia al Hospital Pirovano en una ambulancia del SAME. A pesar de los 28 puntazos recibidos en distintas partes del cuerpo, principalmente el abdomen, rostro y cuello, la víctima evoluciona favorablemente y está próxima a recibir el alta .

Fuente: Clarin