Nacional, Saturday 29 de June de 2024

Una joven de Buenos Aires fue la llave para reactivar el caso cuando días atrás vio una publicación en redes sobre la búsqueda de Carlitos González y reconoció la foto. Era la misma que su novio tenía guardada en el celular y se la había mostrado diciéndole que se trataba de él cuando era chico.

Carlitos mira serio a la cámara, con sus ojos grandes y oscuros y vestido con un buzo de color azul. Esa imagen, la única que se conoce del nene que tenía dos años cuando lo vieron por última vez en Corrientes en diciembre de 1993, resurgió ahora en medio de la búsqueda del pequeño Loan Danilo Peña y ocurrió lo impensado: el enigma de su desaparición podría llegar a su fin.

Una joven de Buenos Aires fue la llave para reactivar el caso cuando días atrás vio una publicación en redes sobre la búsqueda de Carlitos González y reconoció la foto. Era la misma que su novio tenía guardada en el celular y se la había mostrado diciéndole que se trataba de él cuando era chico.

“Cuando lo vi en las redes tuve una crisis de nervios”, dijo a TN la joven, cuya identidad prefirió mantener bajo reserva. Y subrayó: “Hay un millón de cosas que no me cierran, pero yo estoy segura que es él”.

De acuerdo a su relato, pasada la conmoción inicial su reacción fue empezar a buscar inmediatamente respuestas. “Me puse re contenta, pensé ‘lo encontramos’”, recordó la mujer, que se puso en contacto con mucha gente de la provincia de Corrientes y hasta con el padre de ese chico perdido, Carlos González. Rasgos, fechas, las coincidencias no eran pocas, pero cuando habló de esto con su novio se llevó otra sorpresa. “Me encontré con una actitud que no me esperaba, se enojó mucho conmigo y no quiere hacerse una prueba de ADN”, lamentó.

Una foto, la punta del ovillo

Al principio de su relación, hace poco más de un año, su novio había puesto la foto viral de Carlitos González en su estado de WhatsApp junto con un corazón y a ella le dijo que era él de chico.

“Me dijo que se la había mandado una vecina de Formosa, donde él supuestamente nació y vivió sus primeros años”, agregó la joven. Según le contó en ese momento su pareja lo había criado una abuela, que después se lo llevó a Misiones y recién conoció a su mamá a los 14 años.

“Tiene muchas inconsistencias la historia que me contó de su infancia”, reconoció. Asimismo, la joven señaló que en el año y medio que llevan de noviazgo nunca conoció a nadie de la familia de su pareja, a excepción de una hermana que es la única que vive también en Buenos Aires.

 “Con ella hablé, le mostré la foto y me dijo que podía ser que fuera él”, apuntó sobre la conversación que tuvo con su cuñada, y agregó: “las hermanas no lo reconocen en ninguna foto, nunca les cerró cómo fue que recién apareció a los 14 años”.

La foto de Carlitos González fue un punto de inflexión para ellos. Con pena, la joven reconoció que hubo un distanciamiento en la pareja a raíz de la postura activa que ella tomó en el tema y la negativa de él para hacerse los estudios y terminar con la incertidumbre. No obstante, a más de 900 kilómetros de distancia, la ilusión sigue en marcha.

Un lunar, los hoyuelos en la sonrisa y la esperanza que crece

Entre todas las personas con las que se comunicó después de toparse con la foto del chico desaparecido en redes, la joven habló con Carlos González. “Yo le compartí una foto actual de mi novio y el señor me dijo que para él también era su hijo porque lo vio muy parecido, lo sentía así”, indicó.

Ella creyó que estaba ayudando a abrir una puerta, pero se quedó apenas en el umbral, sin poder sortear la inesperada resistencia que encontró del otro lado. “Después de la discusión que tuvimos cambió su versión, me dijo que la mujer de Formosa que le mandó la foto le había querido hacer una broma de mal gusto y que perdió su contacto”, indicó.

 “Nunca voy a saber cómo llegó esa foto a su galería hace un año ni por qué me la mostró. Tampoco sé por qué se niega a hacerse un ADN y darle tranquilidad a esa familia”, expresó finalmente, y agregó: “El papá de Carlitos merece al menos saber la verdad, aunque después no quiera tener un vínculo con él, pero que sepa que su hijo no está muerto”.

Días atrás, TN se comunicó también con Carlos González y al ser consultado sobre esta novedad, el hombre aseveró: “Cuando vi la foto sentí que era él, yo espero que se le ablande el corazón y se haga el ADN”.

“Dios me va a bendecir, lo voy a encontrar. La esperanza no la pierdo y creo mucho en Dios”, sostuvo el padre del chico desaparecido.

El ADN, la prueba clave

En la actualidad hay más de 100 niños desaparecidos, de los que alrededor de 80 son menores y el resto ya superaron la mayoría de edad. “Hay cuatro denuncias diarias, todos los días se pierden chicos”, explicó Ana Rosa Llobet, presidenta de la ONG Missing Children Argentina a TN.

En este dramático escenario, no son pocos los llamados que recibe la asociación de personas que aseguran haber reconocido a alguno de los chicos que aparecen en la lista que tienen publicada en su página web. El rol de la prueba genética es clave en esta instancia, pero no siempre el sujeto en cuestión accede a realizarse el análisis.

“Si alguien reconoce a uno de esos chicos, la familia tiene que saber, la Justicia tiene que saber. Y después actuarán de acuerdo a lo que la ley permite”, explicó Llobet. Y reafirmó: “La Justicia es la que puede determinar qué hacer, cómo manejar la situación”.

No obstante, también aclaró: “Una persona se puede negar a hacerse un ADN, la obligación de hacérselo es bastante polémica”.

El caso Carlitos González, el nene que desapareció en Corrientes en 1993

Carlitos tenía dos años cuando desapareció el 26 de diciembre de 1993 durante una fiesta de cumpleaños al que había ido acompañado solamente por su tía. “Él había salido a jugar a la pelota con otros chicos a unos 50 metros del lugar en donde estaban los adultos”, contó a este medio su papá, sobre aquel día que cambió su vida para siempre.

La dramática noticia de la desaparición del nene empezó a correr de boca en boca casi tan rápido como la versión de un auto rojo sospechoso que había sido visto en la zona rural donde se llevó a cabo la reunión familiar.

Con el correr de las horas, lejos de desdibujarse, la pista del misterioso vehículo fue cobrando cada vez más fuerza. “Ese coche tuvo un accidente menor frente a una cancha de fútbol, se cayó en una cuneta”, apuntó el padre de Carlitos.

Entonces, las personas que en ese momento se encontraban disputando un partido en esa cancha se convirtieron inesperadamente en testigos clave del caso de su hijo.”Ellos vieron que llevaba a un chiquito adentro del auto. El nene lloraba, pero no sabían que era Carlitos, tenía la misma ropa”, resaltó González, haciendo referencia a lo que oportunamente declararon en la Justicia.

El auto rojo siguió su marcha aquel día y recién tres semanas después de que Carlitos se perdiera, la investigación se inclinó hacia un secuestro y la posibilidad de que la víctima ya no estuviera en el país. Nunca, sin embargo, hubo un pedido de rescate. Los días se convirtieron en meses, después en años y en décadas, pero Carlos González nunca dejó de buscarlo.

Consejos a seguir apenas sospechás que tu hijo está perdido

 

- Apenas sospecha que su hijo está perdido, comience a llamar a los amigos y compañeros de colegio para averiguar cuando lo vieron por última vez y que información le pueden brindar.

- Llame a todos los familiares contándoles la situación y viendo si ellos tienen alguna información.

- Averiguar si se llevó celular, tarjeta SUBE o ropa

- Haga la denuncia en la Comisaría más cercana e incluya su autorización a Missing Children Chicos Perdidos de Argentina para difundir la imagen.

- Si se negaran a tomársela con la excusa que hay que esperar 24 o 48 horas, diga que sabe que su hijo está en “situación de riesgo” e insista en que se la tomen.

- Solicite también copia de la denuncia. Averigüe en la Comisaría adonde se derivará la denuncia, concurra al lugar indicado, si la causa no hubiera llegado todavía de la Comisaría, solicite realizar la exposición del hecho denunciado, brindándole todos los detalles y aportando una foto del menor, lo más actualizada posible.

- Para poder informarlos de los pasos a seguir una vez realizadas las etapas anteriores, comuníquese por Whatsapp al: 11 4157 3101

- Mail: [email protected] /TN

Fuente: Contexto