Durante el Día internacional de la pizza, este viernes la Asociación de Pizzerías y Casas de Empanadas de la República Argentina (Apyce) brindó en la Ciudad de Buenos Aires una gran degustación gratuita de porciones tradicionales (muzzarella) a todos los que se acercaron al Obelisco. El evento se desarrolló sobre avenida Roque Sáenz Peña al 1100 y fue tal el placer gastronómico que causaron, que las personas decidieron hacer la fila más de una vez.

Abierto a todo el público, la entidad impulsora de la movida utilizó un camión de cocina autosustentable de 11 toneladas para elaborar las 4.000 porciones. Según contaron a MDZ, habían alrededor de 25 maestros pizzeros que, con sus manos mágicas, 150 kilos de harina, 50 de salsa de tomate y 180 de muzzarella, llevaron adelante la exquisita muestra.

La deliciosa jornada que se vivió frente al Obelisco

Es la primera vez que la Asociación hace algo de este estilo. Y, de hecho, tiene un fin: le donará el equivalente al valor de todas las pizzas que se distribuyeron gratuitamente al comedor "Los Piletones de Margarita Barrientos". Eligieron entregar 4.000 porciones porque estratégicamente era lo más viable. En la noche de la pizza y empanada, que se hace cada 15 de septiembre, planean organizar algo similar.

"Me enteré por la tele y vine con mi mamá. Soy fan de la pizza y podría comerla todo el día", comentó una joven mientras esperaba en la larga fila. Hace una semana que los cocineros se preparaban para este día, a puro trabajo pero con el objetivo de compartir su pasión.

Rodrigo Beretta, uno de los talentosos maestros pizzeros que se ofreció para llevar adelante este evento benéfico, comentó que al ser un egresado de la escuela no dudó en participar. Hace aproximadamente 20 años que se desempeña en el rubro, "casi por accidente" como comentó, pues tras ser despedido encontró su camino en la gastronomía.

Sergio Moro también lleva un largo recorrido en el rubro: más de 10 años y un emprendimiento de empanadas. Junto al resto de sus colegas, prepararon arriba del camión el gran deleite.

Risas, aplausos, fotos y sonrisas. A la primera mordida, ya se podía ver el brillo en los ojos de los "clientes", que no dudaban en felicitar a los profesionales y, en la mayoría de los casos, hacer la fila en más de una oportunidad. "Lo vale", comentaron varios presentes que estaban dispuestos a esperar lo que fuera para seguir degustando las porciones.

¿A la piedra o al molde?

No puede faltar el gran debate acerca de qué estilo de pizza se prefiere: al molde o a la piedra. Rodrigo opinó que ambas son opciones deseables, pero cuando es a la piedra sólo debe ser de muzzarella; en caso de que sea al molde, se tiene que llevar adelante algo más elaborado.

Por su parte, Moro eligió un bando. "Qué compromiso, qué debate", exclamó, y tras meditarlo unos segundos, atinó a responder: "La realidad es que a mí me gusta al molde".

Fuente: MDZ