Nacional, Wednesday 21 de August de 2019

Parece exagerado pero es lo que afirma un nuevo estudio para alertar sobre los peligros de la conexión permanente

El tiempo que no debe excederse en las redes sociales para preservar la salud mental es media hora. Demasiado poco ¿verdad? Nos pasamos todo el día conectados. Para saber en qué anda el mundo, conocer las últimas noticias, conversar con los amigos, por trabajo, y para entretenernos.

El tema es que ya se empieza a comprobar por la ciencia lo que también veníamos sospechando: que no nos hace del todo bien. A veces percibimos que estar tanto tiempo con la vista en la pantalla de nuestro dispositivo móvil nos genera ansiedad, vista cansada, tensión y hasta dolores de cabeza. Ahora la los estudiosos lo empiezan a alertar: sugieren que más allá de un cierto número de días, horas o minutos, el uso frecuente de las plataformas virtuales puede ser perjudicial para la salud mental.

Incluso, es posible que se haya encontrado un punto de referencia sobre cuánto tiempo es razonable dedicar a las redes sociales. Según un estudio que publicará en diciembre el Journal of Social and Clinical Psychology, limitar la permanencia a media hora al día sería bueno para la salud mental.

Melissa Hunt, Jordyn Young, Rachel Marx y Courtney Lipson, investigadores de la Universidad de Pensilvania analizaron los hábitos de navegación de 143 estudiantes universitarios de entre 18 y 22 años, en dos fases distintas: una en la primavera y la otra unos meses más tarde, en otoño.

Su punto de partida fue un estudio preliminar que consistió en hacerles un seguimiento durante una semana a los participantes en el uso de sus redes sociales Facebook, Instagram y Snapchat. Luego evaluaron su salud mental a través de una selección de siete factores: apoyo social, miedo a perderse algo (el fenómeno FOMO sigla de fear of missing something), soledad, autoaceptación, autoestima, ansiedad y depresión.

En una segunda etapa los separaron en dos grupos y los observaron durante tres semanas: el primer grupo tenía que mantener sus hábitos sin cambios, el segundo limitaba su presencia en las redes a 10 minutos por sitio por día. Este período terminó con una nueva evaluación de su bienestar psicológico. Según los investigadores, los participantes que redujeron su uso a media hora al día encontraron una mejora significativa en su calidad de vida con una disminución de la soledad y la depresión. El nivel de ansiedad y FOMO disminuyó en ambos grupos.

¿Sos capaz de hacer la prueba?