Nacional, Wednesday 10 de October de 2018

María Sol Ordás obtuvo hoy la primera medalla dorada para la delegación argentina en los Juegos Olímpicos de la Juventud tras vencer en la final de la categoría single scull femenino de remo, celebrada en el Parque Urbano, ubicado en el Dique 3 de Puerto Madero

La remera María Sol Ordás obtuvo el primer puesto en la final de la prueba single scull femenino y le dio la primera medalla dorada a la delegación argentina en los Juegos Olímpicos de la Juventud “Buenos Aires 2018”, en una competencia disputada en el Parque Urbano, ubicado en el Dique 3 de Puerto Madero.

“Estoy muy emocionada. Hoy me levanté con muchos nervios”, fueron las declaraciones a la prensa de la ganadora.

En una definición pareja en los primeros instantes, Ordás logró la ventaja en los últimos metros de la final sobre la sueca Elin Lindroth. La atleta argentina finalizó con un tiempo de 1 minuto 43 segundos 81 centésimas, 50 segundos por delante de Lindroth, quien se llevó la medalla plateada.

“Nunca me di cuenta de la ventaja que llevaba, tuve que esperar la confirmación”, aseguró tímidamente la deportista.

En tanto, la representante de Uzbequiztán, Luizakhon Slomova, fue cuarta en la final disputada en el Parque Urbano de Puerto Madero.

“Esto es un sueño”, fueron las primeras palabas de la flamante campeona olímpica.

Ordás se convirtió en la tercera campeona mundial juvenil luego de los oros logrados por Braian Toledo en Jabalina (Singapur 2010) y Fancisco Saubidet en Winsurf (Nanjung 2014).

Durante la ceremonia de premiación se la observó muy emocionada a la deportista argentina, que fue ovacionada por todo el público presente y especialmente por su familia.

 

María Sol Ordás tiene una vida ligada al remo que heredó de sus padres. Hija de Damián y Dolores Amaya, olímpicos con Argentina en diferentes Juegos, la joven de 18 años confirmó con el primer puesto en single scull las grandes expectativas que había depositadas en ella.

La remera del Club de Regatas de San Nicolás de los Arroyos tiene la particularidad de haber nacido un día antes de la ceremonia de apertura de Sidney 2000, donde había ido a competir su progenitor.

Su mamá Dolores también se había clasificado pero no pudo concurrir porque estaba embarazada, aunque ya había sabido lo que significó ser olímpica en Atlanta 1996.

 

Su papá, triple medallista en los Juegos Panamericanos de Winnipeg 1999 -dos medalla de oros y una de plata- sufrió un grave accidente cerebrovascular en 2008 del cual pudo recuperarse.

Sol contó que empezó a "remar a los doce años" y que al "principio sentía la presión porque mis padres fueron olímpicos y consiguieron logros, pero ahora ya se fue debido a que ellos nunca me la hicieron sentir".

Nacida en San Nicolás, comenzó practicando hockey, pero terminó abandonando y luego de que su madre le dijera que tenía que practicar otro deporte, se decidió por el remo, que la apasiona porque "todo el tiempo tenés que competir contra vos misma".

Como en su ciudad las condiciones para remar no son las ideales debido a que hay mucha corriente y es necesario aguas más calmas para conocer con exactitud los tiempos, en la previa a estos Juegos se instaló en Tigre para focalizarse en la preparación junto a otros compañeros de equipo.