Nacional, Tuesday 14 de August de 2018

El abuso de estos dispositivos puede llevar a la sordera. Cuáles son los factores que causan malestar y cómo regular el uso de los auriculares.

Aislamiento, desconcentración y sordera son algunas de las posibles consecuencias cuando se abusa en el uso de los auriculares. El uso constante de teléfonos celulares y auriculares a un volumen demasiado alto provoca que un 30 % de los adolescentes sufran disminución del sentido auditivo.

Los chicos están pegados todo el día a los auriculares, porque la música es una de sus prioridades. Los expertos afirman que los adolescentes viven despersonalizados y aislados de los ruidos comunes de la vida diaria, ya que prefieren concentrarse en un aparato que les permite sentirse bien y soñar con su música.

La mayoría de los padres reniega porque sus hijos se encierran en su habitación para escuchar música y no se sacan los auriculares ni en la mesa. La aparición intermitente de un zumbido en algún oído, la dificultad para entender o identificar palabras en una conversación y la incomodidad de escuchar sonidos agudos son de las primeras manifestaciones de pérdida progresiva de la audición. Estos síntomas son una advertencia de que ha llegado el momento de hacer una consulta al médico.

La intensidad

Antes de comprar cualquiera de estos artefactos, lo más recomendable es explicarles a los hijos los posibles riesgos que tiene el uso descontrolado de estos dispositivos. El excesivo volumen, la intensidad y la duración de la música son los factores que provocan los malestares en el oído interno.

Si bien los auriculares son buena compañía para viajes o cuando hay que esperar en una fila; se debe evitar que el adolescente lo use cuando socialice. Escuchar música en situaciones como la cena o un encuentro familiar puede afectar el desarrollo de habilidades sociales y crear la fascinación por el aislamiento. Además si se usan en la calle, puede hacer que sea más vulnerable a los accidentes, porque no podrá escuchar bocinas ni señales de alerta.

Fijar horarios

Los especialistas aconsejan hablar con los hijos sobre la salud y fijar horarios para que pueda escuchar música. No debe permitirse que caminen con auriculares en la calle. Eso lo pondrá en una situación vulnerable a robos o accidentes.

Lo ideal es que los padres puedan compartir momentos con sus hijos y en los que puedan escuchar música en la casa o en el auto con los parlantes de otro equipo, sin auriculares. No se debe permitir que escuchen música con audífonos a un volumen alto por más de dos horas seguidas.

También hay que asegurarse de que el aparato esté en buenas condiciones para que no emita otros sonidos más molestos.

Los especialistas advierten que muchos chicos sufren de esta “hipoacusia”, o un daño a nivel del oído interno. Se afectan las células ciliadas del oído interno y las van dañando, lo que puede producir un daño en un plazo más corto del que se esperaría que aparezca en edades adultas.