Internacional, Thursday 29 de March de 2018

El hecho se originó cuando unos detenidos despojaron de su arma a un guardia que resultó herido. En medio de la riña se generó un incendio que alcanzó a los colchones de las celdas, lo que expandió rápidamente el fuego.

El Fiscal General de Venezuela, Tarek Saab, confirmó hoy que al menos 68 personas fallecieron en un “presunto incendio” en una cárcel de la Policía Estatal de Carabobo, en el centro del país, donde, según medios locales, estalló un motín durante la madrugada.

“El Ministerio Público informa a la opinión pública que ante los terribles hechos acaecidos en la Comandancia de la Policía del Estado Carabobo, donde por un presunto incendio fallecieron 68 personas, hemos designado 4 fiscales para esclarecer estos dramáticos hechos”, dijo Saab en su cuenta de Twitter.

Señaló en otro tuit que tras las “indagaciones preliminares”, son 66 los hombres muertos así como dos mujeres “que se encontraban en calidad de visitantes (pernocta)” y que a todos “se les realizaron los respectivos protocolos de autopsia y entrega respectiva de los cuerpos a sus familiares”.

“El Ministerio Público Venezolano garantiza que profundizaremos las investigaciones para esclarecer de forma inmediata estos dolorosos acontecimientos que ha enlutado a decenas de familias venezolanas. Así como establecer las responsabilidades a que haya lugar”, aseguró en otro mensaje el que también fuera Defensor del Pueblo.

Según lo que reconstruyeron los medios locales, los detenidos habrían prendido fuego colchones y le habían quitado el arma a uno de los policías. ‘El amontonamiento habría dejado decena de muertos y heridos. Algunos murieron calcinados y otros por asfixia‘, remarcó Carlos Nieto, el coordinador general de la ONG “Una Ventana a la Libertad”.

 

 

En medio del incidente, los familiares de las víctimas se acercaron a la prisión. Durante la protesta, se enfrentaron contra la policía que respondió con gases lacrimógenos y palazos.

Las organizaciones de derechos humanos señalaron que este centro carcelario presentaba niveles muy altos de hacinamiento. Desde “Una Ventana a la Libertad” registraron que al menos 62 presos murieron en 2017 por padecimientos asociados a la desnutrición y tuberculosis.