Misiones, Wednesday 22 de February de 2017

Con el fuerte impulso que la Provincia viene dando a la agilización de los pasos fronterizos y la integración, desde Jardín América alistan todo para la llegada de una nueva balsa que unirá el municipio con Capitán Meza, Paraguay. 

Según lo indicado por el delegado de Migraciones de Posadas, Juan Manuel Holz, en la jurisdicción que le corresponde hay seis pasos que operan con balsa: San Javier, Panambí, Alba Posse, El Soberbio, Puerto Maní y Puerto Rico. A éstas, se suman las dos de la jurisdicción de Puerto Iguazú, a cargo de Jorge Lacour: Eldorado y Puerto Iguazú. 
Además, Holz detalló que existen otros pasos que operan con lancha, como Candelaria, Puerto Oasis, Puerto Rico, Garuhapé, Paranaí y San Javier. En Posadas y Santa Ana, el pase con este sistema existe pero no esta funcionando (ver Exigen...)
En el caso de Jardín América, de acuerdo a lo que contó el intendente Oscar Kornoski a El Territorio, la idea es “crear una vía de comunicación entre Paraguay y Brasil, que pasará a través de Jardín y del cruce Alba Posse-Porto Mauá”.  “Del lado paraguayo se está dando una fuerte gestión, tienen todo listo, les conviene en comercio y turismo. Y de nuestra parte también acompañamos con la ayuda de la Provincia y Nación. Sabemos que es una zona clave y permitiría la triangulación entre los países”, remarcó. 

Vía de comunicación
En muchos casos, la balsa es la única vía con la que cuentan los pueblos para conectarse, pese a que comparten cultura, comercio y turismo. Es el caso de Panambí-Veracruz, que cuenta con una balsa brasileña que pasa todos los días. Sin embargo, la falta de una aduana del lado gaúcho frena un poco el flujo en el paso fronterizo. En El Soberbio-Porto Soberbo, aunque funciona la balsa, es muy poca la gente que cruza. El precio es de 80 pesos por auto con chofer y 40 el acompañante, más el impuesto municipal. No obstante, la mayoría opta por viajar hasta Bernardo de Irigoyen para cruzar a Brasil y lo mismo en el sentido inverso. 
En algunos municipios, está proyectada la construcción de un puente binacional. Si bien el gobernador Hugo Passalacqua ratificó su postura en defensa de la creación de los viaductos que unifiquen los pueblos vecinos, aún faltan las decisiones políticas nacionales para comenzar las obras, Mientras tanto, los pobladores utilizan las balsas para cruzar el río. 
Un caso lo representa Porto Mauá-Alba Posse, cuyo intendente, Celso Carvalho, indicó que “en el puerto funciona hace seis meses la exportación e importación y eso genera interés en el transporte de carga. Por eso nos ilusiona la idea de un puente, pero en principio buscamos unificar y ampliar horarios y sumar balsas”. Actualmente funcionan dos balsas, de 8 a 11.30  y de 14 a 17.30, de lunes a lunes, incluyendo los feriados con horarios restringidos.
De igual forma ocurre en San Javier, donde la promesa de un puente con Porto Xavier persiste hace tiempo e incluso fue anunciado por legisladores brasileños a mediados de 2016. Según el alcalde Enio Lemes, “hay muchas firmas que exportan e importan a través de nuestro paso, es un gran generador de fuentes laborales, porque también tiene mucho que ver el intercambio comercial y turístico”. El servicio funciona todos los días de 8.15 a 17.30 y fin de semana y feriados desde las 9.15. 
El caso de Iguazú es particular, puesto que, pese a que tienen el puente, sigue vigente el sistema de balsas. De acuerdo a lo que explicó César Dalazen, dueño de una de las dos balsas que cruzan (la otra es paraguaya), “la gente sigue eligiendo la balsa porque el puente está colapsado y se tarda mucho, yo estoy operando desde 2004 y cada año se incrementa el número de gente que cruza en balsa”. El recorrido que realiza es desde Iguazú hasta la comuna de Presidente Franco, de lunes a sábado de 8.30 a 17. El precio es de 130 pesos por auto con chofer y 30 por acompañante.

Exigen la balsa Santa Ana-Alborada
SANTA ANA (Corresponsalía). Feriantes que pasan de Nueva Alborada (Paraguay) a comercializar en Santa Ana, reclaman la continuidad del servicio de lancha que se puso en marcha en febrero de 2016 y dejó de operar hace cuatro meses.
El servicio dejó de funcionar por causas mecánicas afectando a unas 60 personas que cada martes y jueves cruzan el río con sus productos de chacra, como lo hacen desde hace más de 35 años. Por eso, los feriantes se organizaron y ahora cruzan en unos quince botes, aunque reclaman la pronta restauración del servicio.
La lancha de pasajeros pertenece al municipio paraguayo por lo que son las autoridades del país vecino quienes deben dar la solución. Sin embargo, los vecinos pidieron una intervención del lado argentino. El intendente de Santa Ana, Pablo Castro, dijo a El Territorio que se están realizando las gestiones para que el servicio se normalice.
Al referirse al peso de la carga, detalló que "la cantidad de personas por bote no debe pasar de tres o cuatro, venimos a vender nuestros productos y a llevar mercadería de acá para allá, lo que ganamos de la venta en la feria municipal de Santa Ana lo invertimos nuevamente en los comercios de aquí con alimentos no perecederos", dijo Máximo Sanguina. 
Al tiempo que añadió: "Tenemos canoas propias, pero no son seguras, necesitamos la lancha porque en mucho de los casos son mujeres las que vienen y tienen que remar solas, es un tramo largo que nos lleva casi una hora". 
El servicio se había reanudado el 18 de febrero de 2016 después de años sin actividad portuaria.