Internacional, Friday 30 de September de 2016

La Justicia de ese país consideró que era miembro de una organización que enviaba combatientes a Siria. Le dieron ocho años de prisión.

La Justicia española condenó y detuvo al santafesino César Raúl Rodríguez a ocho años de prisión, tras probarse su vínculo con la "Brigada Al Andalus", una organización que "se encargaba de enviar combatientes yihadistas" a zonas de conflicto bélico, como Siria.

La Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que integra el poder judicial del país ibérico, dictó un fallo el miércoles pasado que dispuso la prisión de Rodríguez y otros ocho miembros del grupo extremista. Esa sentencia incluyó al líder de la organización, Lahcen Ikassrien, quien estuvo preso en la cárcel de Guantánamo (Cuba) y recibió el castigo de 10 años de prisión por ser el dirigente de la célula y a 1 año y 6 meses de prisión por falsedad en documento oficial.

Rodríguez y otros tres arrestados esta semana -los marroquíes Mohamed Khalouk, Abdeslam el Haddouti y Oialae Chergui- estaban en libertad condicional a la espera de la resolución de la sentencia judicial, después de que fueran detenidos en el marco de una operación desarrollada el 16 de junio de 2014.

De oficio albañil, el santiagueño vive en España hace 10 años y está casado con una mujer marroquí por cuyo vínculo se convirtió al islam. Cuando el caso salió a la luz, la familia defendió ante la prensa la defensa del emigrado y aseguraba que el joven, de 27 años, era "incapaz de hacer daño a alguien".

"Es Musulmán practicante, pero está muy lejos de ser un terrorista", afirmaba su hermana Luciana Rodríguez.

El juez Fermín Echarri explica en su fallo cómo este grupo, encabezado por Ikassrien (alias 'Hassan'), era una "auténtica plataforma de envío de combatientes yihadistas". Así, describe cómo algunos de los nueve acusados ya tenían pensada y planificada su salida de España con dirección a Siria, contextualizando este viaje como motivos laborales.

 En el escrito judicial, el argentino figura con el nombre de Cornelio Ricardo, alias "Cebollero". Para condenarlo, la justicia corroboró reuniones que mantuvo con otros acusados con el objetivo de trasladarse fuera del país. También compró "material de montaña" junto a otro de los condenados, y "estaba decidido a desplazarse al exterior para hacer la 'yihad' como lo acreditan los documentos incautados en su domicilio", señala la sentencia.

Echarri afirma que todos los miembros de la organización "experimentaron un proceso de radicalización y adoctrinamiento, planificado en distintas fases, en las que en la última, llevada a cabo en diversas reuniones dirigidas por el acusado Lahcen Ikassrien, eran sometidos a un proceso de transmisión de ideas religiosas y políticas justificadoras del ideario y acciones de las organizaciones filiales de 'Al Qaeda' en el conflicto sirio, así como la necesidad de participar activamente e incorporarse como integrantes de las mismas".

En paralelo, los condenados realizaban apología del terrorismo a través de las redes sociales y de numeroso material de vídeo incautado en sus domicilios, de acuerdo a los medios españoles que reprodujeron la sentencia judicial.

 

El argentino, junto a los acusados "Humberto Ovidio, Gabino Romeo y Narciso Rodolfo" seguían por el año 2014 "las instrucciones difundidas por la red yihadista, con el fin de no ser detectados por los servicios de seguridad". El destino final al que partirían, sostiene el juez, "eran las organizaciones terroristas que operaban en territorio sirio".

 Fuente: Infobae