Pasa que el magistrado Horacio Heriberto Alarcón decidió apartarse porque un familiar asumió la defensa de uno de los ocho imputados que tiene el caso.
Todos los sospechosos siguen entre rejas, a la espera de que resuelvan su situación procesal. El jueves, se le notificará de la novedad a las partes. Las actuaciones pasarán entonces al Juzgado de Instrucción Uno de la Capital del Monte, a cargo de Alba Kunzmann. La magistrada deberá decidir si acepta la competencia.
La causa había empezado a tramitarse en Alem, porque el cadáver calcinado de D’Amico fue encontrado en el paraje El Chatón, en las afueras de esa localidad, el 30 de octubre del año pasado. Sin embargo, las pesquisas posteriores permitieron determinar que la víctima fue ultimada a barretazos en una carnicería obereña.
Precisamente esa carnicería es el epicentro de todo el expediente. El dueño del lugar es apuntado como el autor material del homicidio y al menos dos conocidos suyos son sindicados como cómplices. En total, están imputados siete hombres y una mujer.
Los más comprometidos por el hecho son el carnicero Diego Benegas, quien tenía una deuda con D’Amico y habría sido quien lo mató a golpes con una barreta; su empleado Jhonatan Emanuel Gutiérrez y Diego, hermano de este último. Los hermanos habrían colaborado para limpiar la escena del crimen y luego deshacerse del cuerpo.