Misiones, Friday 30 de January de 2015

Denuncian que 25 familias esperan la mudanza desde hace siete meses. Soportan condiciones de vida totalmente insalubres. Casi cien niños padecen infecciones y sobreviven en el hacinamiento

Casi cien niños y adolescentes de la localidad de San Javier cuyas familias lo perdieron todo en la gran crecida del  Río Uruguay, en junio pasado, sobreviven en las “casitas provisorias” desde hace siete meses a la espera de la prometida solución habitacional definitiva, soportando condiciones de insalubridad y hacinamiento que les afectan seriamente la salud.
 
Por esta situación extrema, no descartan tomar las viviendas permanentes que ya se encuentran listas y que temen sean entregadas a personas que no fueron afectadas por la inundación, según denunciaron desde el Partido Agrario y Social.
 
Los chicos componen las 25 familias que todavía esperan la mudanza a las casas de madera construidas con fondos nacionales y provinciales tras el desastre que dejó la gran inundación de mediados del año pasado, y que no entienden por qué motivo todavía no se les entregan las viviendas definitivas, puesto que “están listas y cerradas con llave”.
 
La gran preocupación de las familias en este momento es el estado de salud de los menores que padecen de infecciones en la piel, aparentemente contagiosas, y que podrían estar relacionadas con el desborde de las letrinas en cada lluvia, ya que los pozos construidos apenas tienen medio metro de profundidad.  “No solo los chicos están con esos granos, todos estamos igual”, aseguró una de las mujeres del precario barrio.
 
“Es que nos teníamos que quedar acá apenas un mes y ya pasaron siete meses y no se aguanta más. En la casita entran dos camas de una plaza y nada mas, ni un roperito… la ropa de la escuela está todavía llena de hongos y humedad, hay ratas que vienen del monte…” agregó una de las afectadas que en junio vio cómo su casa era arrancada de cuajo por la corriente del Uruguay.
El diputado Bárbaro indicó que “vamos a instar a un serio relevamiento en toda la provincia en los lugares afectados, porque no es la primera queja por retrasos inexplicables, o denuncias de que se les entregó las casas a gente que no fue afectada. No se puede jugar con esto, todo el país colaboró cuando se vio la dimensión del drama que vivieron estos vecinos, y ahora los tienen en estas condiciones deplorables… es una estafa a la fe púbica esto”.
 
Los afectados aseguran que desde hace al menos tres meses, el intendente de San Javier, Rubén de Lima Natividade, les promete la mudanza “para la otra semana”.
 
“Nos tienen así desde hace meses, y la última vez nos dijeron desde la municipalidad que no tenemos porqué quejarnos, porque no pagamos agua ni luz… y nosotros no queremos de arriba las cosas, queremos que nos entreguen las casas que se hicieron para nosotros, porque el agua nos arrastró las viviendas ya en la primera inundación y no en  la segunda como dicen”, finalizaron los afectados.