Misiones, Sunday 27 de July de 2014

El ministro de Gobierno indicó que se equivocan quienes plantean el hecho como algo institucional, porque lo hecho por el grupo de uniformados preso no refleja el espíritu de la institución. Este lunes recibirá a la familia del albañil.

El ministro de Gobierno de la provincia, Jorge Franco, habló sobre el crimen de Carlos Raúl Girula (30), el albañil asesinado a golpes tras ser detenido por la Policía tras un incidente en un motel posadeño. “Acá nadie escondió nada, desde el primer momento se dio a conocer. Se intervino y se tomaron todas las decisiones políticas que corresponde en el caso”, afirmó. Adelantó además que este lunes recibirá a la familia del trabajador asesinado.

“Se trata de policías que cometieron un acto deplorable”, remarcó y aclaró que la actitud del grupo de uniformados presos por el homicidio en nada refleja el espíritu de la institución del orden. Aseguró que la Policía de Misiones no es una fuerza violenta y aportó un dato: “Apenas hay un 0,2 por ciento de los policías que tienen algún problema en términos judiciales”. Dijo que si en una institución con más de 7 mil efectivos, hay apenas 26 de ellos que tienen problemas judiciales, “eso quiere decir que no es un problema institucional”.
Descartó que lo que sucedió en el caso Guirula tuviera que ver con la formación de los uniformados. Es más, dijo que en la instrucción de los suboficiales el mismo se encargó de que se introduzcan en los contenidos que se les dicta a los aspirantes “Derechos Humanos, Educación Vial y enseñanza de portugués y guaraní”.
Insistió en no plantear esto como algo institucional, sino que “se trata de unas personas que tuvieron actitudes violentas y tendrán que rendir cuenta ante la Justicia”.
“Siempre le bajamos el mensaje del respeto a la integridad física ante todo, incluso de los delincuentes, ese es el concepto que le bajamos”, dijo.
Sobre los pedidos que le hace la población, expuso que solicitan más policías y en no pocas ocasiones mano dura.
Al respecto señaló que están incorporando más efectivos. También rechazó el concepto de “mano dura”, por los riesgos que implica.
“La Policía tiene que seguir actuando para garantizar la seguridad de la población y no se puede decir que todos son iguales porque algunos equivocaron el rumbo. Existen policías que sacrifican su vida para salvar a otros”, marcó.